Ásatrú y Dioses Ibéricos

Una de las preguntas que muchas veces se repiten cuando alguien se informa del Ásatrú es “si estamos en España ¿por qué no rezáis a los dioses ibéricos?”. Naturalmente esta pregunta es una consecuencia del gran cacao identitario que hay en nuestro país y de la imagen del Ásatrú como “religión de los vikingos”. Sobre ese particular no me extenderé aquí porque ya lo expliqué en el artículo Odinistas, no vikingos y en otros he hablado sobre el legado ancestral de España y sobre que cuando hablamos de íberos, celtas, germanos, eslavos… en el fondo se trata de etiquetas impuestas por los geógrafos grecolatinos y posteriormente asumidas por los académicos como si fueran compartimentos estanco, cuando lo cierto es que nuestros antepasados tenían una conciencia tribal y esas etiquetas son inexactas. Sobre esto también habló, y mejor que yo, Stephen McNallen en su artículo Celtas y Germanos, con lo que me parece innecesario repetirlo.

Sin embargo sí que voy a dar mi opinión de cómo interpreto yo a los dioses ibéricos y qué encaje le doy dentro de mis creencias. Yo entiendo que existe una continuidad histórica, más o menos alterada en ciertos periodos, que va desde el pasado más remoto en la Edad de Piedra hasta nuestros días ¿por qué es más válido lo que se hacía en el siglo I que lo que se ha hecho en el siglo XIX o a partir de los años 70 del siglo XX? Siempre que se siga la lógica y que se actúe con criterio, es una manifestación de que la fe es algo vivo y por lo tanto evoluciona.

Una creencia religiosa no puede ser una reconstrucción de laboratorio, no es un proceso racional, científico, arqueológico… o como lo queramos llamar. Esto tal vez choque con la mentalidad de nuestro tiempo donde la religión principal es el culto a la Santa Ciencia, pero por encima de todo una religión tiene un componente de Misterio. Eso quiere decir que es antes de nada una llamada interna, algo que se despierta dentro, en el corazón antes que en la cabeza. Primero se intuye y luego se comprende. Cuando se alcanza la suficiente madurez profundizando en el sendero, se le va dando forma. En este sentido Ásatrú es una expresión entre otras de la vieja religión nativa europea, pero concretamente es “la llamada del Norte” si lo queremos decir así, con todo lo que ello conlleva. Pero cuando uno indaga más, inevitablemente llega a una postura paneuropea por encima de etiquetas puestas por los estudiosos a una u otra tribu de la Madre Europa: esta es céltica, esta es germánica, etcétera. Es por eso que tú no decides seguir a los Æsir y los Vanir; a ti te llaman los dioses del Norte, que es diferente.

¿Pero que hay de Netón y los dioses ibéricos? Lo que a primera vista puede parecer extraño para el que no lo conoce, se entiende mucho mejor cuando se profundiza en la esencia misma de las creencias. Los dioses ibéricos, llamados numina por los romanos, son esencialmente los dioses indoeuropeos, solo que con el nombre que le dieron los oretanos, bastetanos, turdetanos…, todas ellas tribus europeas por mucho que desde la Academia se le quieran buscar tres pies al gato. Insisto, esto es un camino espiritual, hay que seguirlo con el corazón, no obcecarse con tecnicismos o cegarse con si tal tribu era celta, o ibérica, o germánica; pero para los más puntillosos, algunas de estas tribus ibéricas (como los oretanos) eran oriundas del Rin y eran llamadas germani por los romanos. Los iberos desarrollaron su propia teología, pero esta no nos ha llegado. Aun así vemos los mismos patrones, valores y cosmovisión en ellos que en el resto de pueblos europeos. Así mismo, su alfabeto es semejante a las runas y, aunque su valor fonético difiera, hemos de suponer que el componente mágico de estos símbolos era similar.

estela ibérica de Santa Perpetua

Los espíritus menores de los iberos o daimones, como le llamaron los griegos, pueden ser perfectamente equiparados a los elfos o a los landvættir y se entiende que cuando se honra a los espíritus de la tierra en un blót, se les está honrando a ellos. Así mismo habría multitud de deidades femeninas cuyo nombre se ha perdido pero que a buen seguro adoptaron la máscara cristiana de la Virgen María en sus distintas advocaciones. La profusión del culto mariano en España es sin duda un síntoma de la importancia del culto a estas diosas, que perfectamente podemos identificar con las disir y que por lo tanto estamos también adorando cuando les rendimos culto a ellas. Así mismo, todos los seres malignos del folclore hispano son sin lugar a dudas una expresión local de las fuerzas destructoras del caos, conocidas desde la noche de los tiempos, o bien deformaciones cristianas de los viejos dioses.

En este sentido, el Ásatrú no sólo no se opone a los viejos dioses ibéricos sino que lo constituye una continuidad y en cierto modo una restauración de estos. Lo mismo sucede con los héroes o semidioses y otros elementos de la religión ibérica y naturalmente con los ancestros. Podemos apreciar todos los elementos de la religiosidad europea en aquello que conocemos de la religiosidad ibérica, aun con las influencias orientales en su último periodo (que por otra parte también tuvo la religión griega o la romana). Podemos ver un patrón funerario similar, con un destino celeste para los héroes y terrenal para el resto, una gran importancia del sacerdocio femenino que se parece bastante al culto germánico a Nerþus, etcétera. ¿Por qué el panteón nórdico en lugar del ibérico? Pues por encima de todo, como he dicho antes, por una cuestión intuitiva. Pero además de esto, porque aunque las diferencias entre las distintas ramas de la religión europea sean más bien variedades regionales; debemos tener en cuenta que cada panteón es completo en sí mismo, cada pueblo desarrolló su teología y por tanto cada panteón ha de tomarse en su conjunto. En el caso ibérico es prácticamente imposible profundizar más que en el nombre de los dioses y en algunos atributos, pero no tenemos textos teológicos, ni tenemos un ciclo mítico, no tenemos información suficiente.

vaso ibérico con la esvástica

Pero esto no debe verse, creo yo, como que “optamos por lo nórdico en lugar de por lo ibérico” sino más bien como que “la versión nórdica (o gótica) es la más completa y la que más respuesta espiritual puede ofrecernos de ambas versiones, totalmente válidas y nuestras, de la espiritualidad nativa”. Mi visión particular en lo tocante a España es que nuestra raíz última, nuestra esencia, está en la Iberia prerromana, que la Hispania germánica (gótica y sueva) lo que vino a hacer fue restaurar y revitalizar lo celtíbero y que esto, religiosamente hablando, se expresa de esta manera. Creo que la espiritualidad ibérica está perfectamente integrada en Ásatrú, igual que un practicante de Ásatrú de los países del este de Europa no renuncia en modo alguno a su sustrato eslavo. En la Antigüedad esto ha pasado miles de veces, por ejemplo con la llegada de los celtas a las Islas Británicas, que vieron los dólmenes y otros monumentos megalíticos como lugares sagrados de poder y como tal los convirtieron en santuarios, integrándolos en sus creencias. El elemento germánico, en toda Europa, constituye el germen de las naciones modernas y en todos los casos se construyó sobre una base previa. Lo único que ocurre es que en algunos países la identidad tribal está más arraigada y no hace falta tener que explicar estas cosas, mientras que en España la gente asume como “nuestro” únicamente lo católico y romano, lo cual, en mi opinión, es no entender realmente la esencia de lo que es hispánico.

Copyright © Renacimiento Gótico

Identidad Europea

renacimiento-gc3b3tico-logo-1

Acerca de josemvisigodo

Licenciado en Historia por la Universidad de Granada con un máster en Claves del Mundo Contemporáneo y otro en Profesorado de Educación Secundaria. Apasionado de la Edad Media y en especial de la época de los reinos germánicos de la Alta Edad Media y de los visigodos en particular. También me interesa la historia de las religiones y del pensamiento.
Esta entrada fue publicada en Historia, Religión y etiquetada , , . Guarda el enlace permanente.

2 respuestas a Ásatrú y Dioses Ibéricos

  1. Miguel Ángel Galdón dijo:

    Cuanto más leo más quiero saber. Gracias por su labor.

    Me gusta

  2. Pingback: Estirpe Gótica y Celtiberia Moral | Renacimiento Gótico

Deja un comentario